Basta

Lo asumo. Lo siento. No soy escritor. Nunca lo fuí o lo seré. Carezco de las dos cualidades que todo artista debe tener. Talento y esfuerzo. Ya que no lo dicen ustedes yo lo decreto. Odio que me mientan casi tanto como que sean condescendientes. Sepanlo.
Pero no se aflijan. Les informo que lo paso bien cuando, por un rato, me miento que sí. Y les abro la puerta, para que se asomen al lugar donde duerme la fiera que me roe las entrañas. De a poco pa que duela más. Y yo no los dejo tirarle piedras. No!!. A ver si la espantan.
Saben?. Yo la necesito. Por eso la cuido. Le doy de comer mis miserias. Y esta gorda. Cuando esta satisfecha, se descarga unos eructos formidables. Sonoros. Retumbantes como el pedo de los monaguillos. Irreverentes. Irrespetuosos. Y verdaderos. Porque ella nunca miente. No se permite ni una bajeza, ni una falla. Ella es como yo sería si no fuera tan humano. Pero soy.
A dormiiiiir...